La ingesta diaria de una naranja podría reducir en un 20% el riesgo de depresión, según una investigación dirigida por Raaj Mehta, profesor de Medicina de la Facultad de Medicina de Harvard y médico del Hospital General de Massachusetts.
El efecto de la fruta se atribuye a que esta estimula el crecimiento de la bacteria Faecalibacterium prausnitzii (F. prausnitzii), que está en el intestino humano y que influye en la producción de los neurotransmisores serotonina y dopamina, moléculas conocidas por su capacidad para mejorar el estado de ánimo.
En declaraciones a The Harvard Gazette, el investigador detalló que el estudio tuvo su origen en 2016 mientras trabajaba con un postdoctorado con quien accedió a bibliografía que señalaba la posibilidad de que los cítricos reducen el riesgo de depresión.
“Eso despertó nuestro interés porque teníamos acceso a un conjunto de datos muy completo que podíamos utilizar para hacer un seguimiento de este hallazgo”, dijo.
“Se llama Nurses' Health Study II (NHS2) y comenzó en 1989 con el objetivo de encontrar factores de riesgo de enfermedades crónicas importantes en las mujeres. Participan más de 100.000 mujeres y, aproximadamente, cada dos años proporcionan a los investigadores información detallada sobre su estilo de vida, dieta, uso de medicamentos y salud. Así que decidimos aprovechar estos datos para buscar evidencia de que las enfermeras que comían muchos cítricos tenían tasas más bajas de depresión futura que las que no los comían. ¡Y eso fue lo que encontramos!”, relató.